El pasado domingo en horas de la mañana, la periodista de Quimilí Patricia Britos, tuvo la oportunidad de visitar y entrevistar a Miguel Jiménez, el principal apuntado por la justicia en el marco del aberrante crimen de Marito Agustín Salto.
Según relata Britos, arribó hasta el lugar en donde Jiménez se encuentra privado de su libertad, un calabozo de la U.S.A.R. n°26 Unidad para Situaciones de Alto Riesgo de la Policía de la Provincia de Santiago del Estero. Una vez allí “hablamos durante las 2 horas que duró la visita”, dijo y aseguró que el imputado se mostró “emocionado por el encuentro”, además de haber manifestado en todo momento su inocencia, la de su mujer Arminda Díaz y sostener que “hubo muchas irregularidades” en el allanamiento.
Tras la reveladora charla, la periodista fue invitada por una de las hijas de Jiménez a su casa, con el único fin de mostrar el supuesto lugar donde la justicia santiagueña sostiene que se hacían ritos satánicos, descartando de lleno la incoherente teoría.
A continuación los fragmentos más de relevantes y las definiciones más lapidarias del dialogo que mantuvo Jiménez con Britos.
- «Patri soy inocente, somos inocentes, no tenemos nada que ver con lo de Marito, no niego ser devoto del Santo San La muerte al igual que muchas personas lo son de Quimili, yo nunca mate un niño ni a nadie todo lo que se está diciendo son mentiras”.
- “Mi santito estaba a la vista del que haya entrado a mi casa, es más preguntale a Moni Salto (tía de Marito) ella también lo vio, ella entraba a ese cuarto a limpiar la grasa que cayera al piso de los salamines que yo tenía colgados ahí. Moni trabajó conmigo en el quincho cuando era un comedor y también en mi casa haciendo limpieza, trabajó hasta unos meses antes de mi detención, Moni quedaba sola con las llaves de la casa y sola para hacer limpieza”.
- “Vos viste que la pieza donde tenía mi santo no está oculta ni en la oscuridad con una puerta de machimbre con un simple y común pasador, esa puerta de fábrica casera no tenía llaves, cualquier persona que haya estado en mi casa lo vio, es mas hay amigos comerciantes de Quimili que entraron a prender alguna velita por salud de algún familiar enfermo o algo así”.
- “Para los que creemos en él, es un santito muy milagroso yo creo en él como también creo en Dios, en esa piecita donde estaba el santo yo tenía una imagen de la Virgen de un lado”.
- “Patri algún día se va hacer justicia, tengo fe en Dios y en mis abogados que las cosas se van aclarar. Otra cosa que te quería decir es que jamás hubo maltrato de parte mía hacia la jueza ni la fiscal, jamás les falte el respeto cuando estuvieron haciendo el allanamiento pero si hubo muchas irregularidades cuando se lo estaba haciendo”.
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