Desde hace bastante tiempo, una familia de la localidad de Lavalle en el Departamento Guasayan, pide ayuda constantemente a las autoridades municipales, no obstante las autoridades competentes hacen odio sordo a dichos pedidos.
Marta vive con su esposo en una casa muy precaria y tiene a su marido postrado en una cama, ya que él padece una enfermedad muy grave, por lo que está dializado y trasplantado hace más de 13 años.
El petitorio de la construcción de un baño digno para su marido enfermo viene desde hace mucho tiempo, las autoridades según palabras de la propia Marta “vienen, sacan fotos y se van dicen que ya van a volver pero nunca regresan”.
El clientelismo político nuevamente saca provecho ante la necesidad, como en cada elección sólo se aproximan a ellos para darles un bolso de mercadería y unas chapas.
Además de padecer esta grave situación con su precaria vivienda, los servicios de agua y luz también forman parte del ausentismo y negligencia de las autoridades, al respecto Marta afirma: “según lo que nos dicen de los comisionados van a poner luz solamente a 4 casas si es necesario” y agregó“para ellos nosotros somos unos indígenas que no necesitamos de la luz y el agua”.
Una muerte por ausencia de camino
Los caminos son de extrema necesidad para la gente que vive alejada del conglomerado Santiago-La Banda, al respecto Marta recuerda el caso de una vecina que al llamar a emergencia le contestaron que la ambulancia no podía llegar al lugar ya que el camino no estaba en condiciones.
En ese sentido Marta relató: “Hace 4 o 5 días la señora Morán Angela, pidió la ambulancia ya que se encontraba muy grave y que le contestaron desde Lavalle que la ambulancia era muy chica y que el camino no sirve que no podían entrar, no le mandaron la ambulancia”.
Y continuo, “la llevaron envuelta en una colcha a Santiago en una camioneta porque no le mandaron la ambulancia”, y finalizó “no tienen derecho de jugar con la vida de la gente aquí”.
Agregar Comentario