Brenda Vega era la menor de siete hermanos de una familia wichí asentada en el paraje Medialuna, al norte de Salta. Su certificado de defunción fue contundente. Murió por “broncoaspiración, gastroenteritis aguda infecciosa, trastorno metabólico y desnutrición”. Una problemática que no es nueva en la provincia y que, otra vez, impactó de lleno en el Gobierno. “Somos todos responsables por la muerte de esta niña”, admitió el ministro de Primera Infancia, Carlos Abeleira.
El funcionario detalló además que “hay unos 2 mil casos de niños con bajo peso en toda la provincia, algunos de ellos en estado de gravedad en constante crecimiento”. Brenda tenía dos años. Murió el 21 de abril pero su caso se hizo público recién en los últimos días. Había empezado con diarrea y vómitos, dos días después tuvo una recaída, y no logró llegar con vida al hospital de Orán. “La muerte de esta niña es un tema que nos duele a todos», sostuvo Abeleira.
No es la primera vez que la familia de Mauricio Vega y Nancy Choque es atravesada por el dolor. En 2008, ya habían perdido un bebé, también por problemas de bajo peso.