El Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOCF) 4 porteño finalmente fijó en 386.578.500 de pesos la caución real que deberá reunir Lázaro Báez si desea salir de la cárcel tras casi cuatro años y medio en el Complejo Penitenciario Federal I Ezeiza.
El tribunal que lleva adelante el juicio por la «Ruta del dinero K» debió hacer lugar al planteo del fiscal de juicio de tomar el valor de los U$S5,5 millones de la caución real al valor del dólar oficial y no del dólar bolsa.
Por eso, la caución real finalmente bajó desde los 632,5 millones de pesos a los 386,5 millones de pesos, que deberá entregar en dinero o bienes el dueño de Austral Construcciones.
Cuando el tribunal consideró necesarios 632,5 millones de pesos como caución real, la abogada Elizabeth Gasaro aseguró en TN que su defendido no tenía ese dinero. Ahora, sobre la baja de la fianza, la letrada prefirió no responder a la consulta de TN.com.ar.
La defensa cuestionó la imposición de la caución real por la suma de $632.500.000 por considerarla exorbitante y de imposible cumplimiento, en función de los múltiples embargos e inhibiciones impuestos en diversos expedientes a su asistido, solicitando que sea fijada en términos razonables y acordes a la realidad material de Báez», recordó el tribunal.
«La determinación del monto de la caución real deberá ser en el equivalente en pesos a 5.500.000 de dólares porque responde a la diferencia que surge entre la acreditación en cuenta de Kinski S.A. de la suma U$S 10.399.975 proveniente de Foundation Kinsky y el monto que pudo ser cautelado -3.991.037 de euros- y, en consecuencia, corresponde al monto que el acusado dispuso seguir ocultando en tiempos recientes al margen del proceso judicial», remarcó sobre el motivo de la fianza.
El juicio por la «Ruta del dinero K» está en su fase final. En los últimos días, el fiscal Abel Córdoba consideró que Báez y sus hijos construyeron una «compleja ingeniería» para lavar 60 millones de dólares.
En consecuencia, el fiscal solicitó 12 años de prisión para Lázaro, 9 años para su hijo Martín, 5 años para Leonardo Fariña, el «arrepentido» del caso, y 4 años para Federico Elaskar, exdueño de SGI, más conocida como «La Rosadita», la cueva financiera por la que el empresario lavó ese dinero de la obra pública.
El dueño del Grupo Austral, que tuvo a Austral Construcciones como empresa insignia, ya había recibido tres pedidos de penas de entre 8 y 9 años de cárcel por parte de las tres querellas.
En el caso del resto de los Báez, Melina, Luciana y Leandro, los tres libres, el fiscal les otorgó un grado menor de responsabilidad. Por eso planteó penas de 4 años; 4 años y 6 meses, y 5 años, respectivamente.
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