Elina Bernasconi, de 29 años, era una viajera apasionada, pero la tragedia la cruzó en pleno vuelo: sufrió una embolia y un infarto. Para sus dos amigas dormía, pero tenía muerte cerebral. Apenas el avión aterrizó en Qatar fue trasladada a un hospital. Fueron 45 minutos sin oxígeno en el cerebro. No había vuelta atrás. Sus papás tomaron la dolorosa decisión de desconectarla, por recomendación de los médicos.
Ahora el gobierno de Catamarca, de donde es oriunda, traerá su cuerpo de regreso al país.
«No lo puedo creer ella nunca había tenido nada”, contó su madre, Clara Bernasconi.
Elina se había recibido de traductora de inglés y trabajaba en el registro automotor de la capital catamarqueña.
La tragedia fue el sábado de la semana pasada y desde entonces su familia comenzó una colecta para juntar el dinero necesario para traerla de nuevo hacia Argentina. Aunque finalmente el gobierno provincial de Catamarca confirmó que ellos se ocuparían de su traslado con un avión sanitario.