En el día de la fecha y luego de quedar imputado Julio De Vido por sobreprecios en la obra pública de Santiago del Estero, éste se sacó el sayo para colgárselo al ex jefe del ejecutivo local quien al momento de la ejecución de las construcciones denunciadas era el gobernador de la provincia. La denuncia fue realizada por Roberto Azzaretto y la impulsa el Fiscal Patricio Evers en el juzgado de la Dra. María Servini de Cubría.
Luego del impacto causado por la imputación de De Vido en la obra pública de esta provincia, el ahora diputado nacional salió a defenderse con una catarata de tweets para aclarar que “El gobierno nacional sólo brindaba apoyo financiero a partir de créditos gestionados ante organismos multilaterales (BID y CAF)” que además la “Gestión y control lo realizaba la Unidad Coordinadora de Proyectos con financiamiento externo que dirigía Pablo Abal Medina y org. corresp.”.
De Vido entrega a Zamora
Al decir de Julio De Vido la administración de los fondos la realizó el gobierno provincial, es decir el propio Zamora, por lo que, en otras palabras es el responsable del otorgamiento de las mismas a las empresas en cuestión según cada caso y el monto acordado por la obra que aparentemente ya llevaba un sobreprecio abismal y las sucesivas ampliaciones presupuestarias, lo que quiere decir el ex mano derecha de Néstor Kirchner, es que el único, real y total responsable por el desaguisado y manejo excesivo de los fondos del erario es el hoy Senador por Santiago del Estero y presidente segundo de la Cámara Alta.
De continuar así las cosas y siguiendo la lógica del hilo conductor, el variopinto mendocino debería ser llamado a declarar ante la Jueza que entiende en la cusa de sobreprecios particularmente en esta comarca, que podrían marcar un antes y un después en la vida y en el mapa político santiagueño que a partir de la presente jornada , pone en jaque al principal actor en la vida de todos los habitantes de esta región. Hoy ingresó al elenco estable de las defraudaciones de la década ganada un nuevo actor. Gerardo Zamora está, aunque nadie lo diga, comprometido en el ámbito judicial federal.