Se lo ve relajado, atento a cada detalle de la campaña, pero distendido. Eduardo «Chabay» Ruiz es el máximo referente de Cambio Viable y atendió a «Última Hora» al llegar de una caminata.
¿Está satisfecho con la campaña de Cambio Viable?
Le diría que más que satisfecho. Todo se hizo a pulmón, sin recursos financieros, pero con la fuerza y el espíritu que solo da la convicción. El esfuerzo de los dirigentes y militantes fue extraordinario, pero también estuvimos acompañados en cada paso por ese grito silencioso de miles y miles de bandeños que oprimidos por el olvido o el temor a persecuciones nos extendieron sus manos o nos estrecharon en una abrazo esperanzador.
¿Cuáles considera que fueron los eje de esta campaña?
Por el lado nuestro la preocupación es recuperar La Banda para los bandeños. Nos han querido hacer creer que entregando la dignidad y sometiéndose al poder de la provincia íbamos a tener el paraíso y no tan solo que eso no ocurrió sino que se terminó por permitir que se atropellara nuestra historia, nuestra cultura, nuestro patrimonio, en definitiva nuestra dignidad bandeña.
¿A qué se refiere concretamente?
A que convirtieron a la Municipalidad de La Banda en una especie de delegación del gobierno provincial de donde se recibían las ordenes y se cometieron atropellos de todo tipo.
¿A qué atropellos se refiere?
A muchos. Entre otros, han convertido a los bandeños en botín de recaudación a través de multas de tránsito escandalosas de cinco mil pesos o más. ¿Qué bandeño está en condiciones de pagar esa brutalidad? Esa plata puede significar el gasto en comida de un mes o más en la mayoría de las familias. ¿Como se pudo haber permitido esta atrocidad? solo porque no se animaron a decirle que no al poder de Santiago.
¿Que se propone desde Cambio Viable?
Concretamente que recuperemos La Banda para los bandeños. Que reclamemos lo que nos corresponde y pertenece sin tener que arrodillarnos. Pero fundamentalmente no permitir que nos traten como ciudadanos de segunda porque defendemos nuestras costumbres, nuestra historia o porque nos sentimos orgullosos de ser bandeños.
Usted habla mucho del orgullo bandeño
Permítame que le dé un ejemplo de un tema que parece menor, pero que no lo es. Muchos de nuestros «chipaqueros» me contaron que fueron intimados muchas veces a salir de los lugares en lo que habitualmente están, o que les quisieron cobrar no se qué cosas, cuando todos sabemos que en su gran mayoría lo hacen para estirar un poco el ingreso en sus casas, o simplemente viven de eso. Además ellos constituyen un verdadero patrimonio cultural bandeño. ¿Que bandeño no les compró alguna vez? Son un paisaje humano de nuestra ciudad y debemos cuidarlos. Debemos defender nuestras costumbres porque forman parte de ese orgullo bandeño que usted me pregunta.
¿Qué le preocupa para el futuro?
El estado en que encontraremos la Municipalidad. Sé que hay muchos atrasos a proveedores o barrios totalmente marginados sin atención mientras vemos dilapidar recursos municipales de manera obscena en caravanas, actos y otras cosas poco claras.
Suena fuerte
Pero es que se han cerrado comedores municipales en momentos muy difíciles para miles de bandeños argumentando falta de recursos mientras que por otro lado se derrocha plata en fiestas y otras tantas cosas de las que me da vergüenza hablar.
¿Cómo resumiría la propuesta de su sector?
Primero que todo ordenar la Municipalidad y luego de este tiempo de atraso, reiniciar una etapa de crecimiento y desarrollo de nuestra ciudad. Queremos que se terminen las persecuciones y proscripciones, que se termine el miedo a pensar diferente, en definitiva, vivir en libertad como cualquier ciudadano argentino.
¿Siente que fue perseguido y proscripto?
Yo y muchos más. Aquí no se permite pensar distinto o ser opositor, para este régimen eso es un delito. Mi caso fue estruendoso para sacarme de la cancha, para no dejarme participar más en política. Una aberrante persecución, digna de una dictadura. Por suerte aquí se sabe bien que todo fue armado por mentes perversas. Pero quiero mirar hacia el futuro con optimismo, no bajar los brazos, luchar para que lo que me hicieron no le ocurra a ningún otro santiagueño.
Lo noto muy animado
Es que lo estoy. El apoyo y la esperanza de la gente para poder revertir esto me dio mucho más ánimo. Durante la campaña compartí en cada reunión y en cada acto una frase de Pablo Neruda que repetía el ex presidente chileno Salvador Allende que es un verdadero himno para las causas nobles: Podrán arrancar todas las flores, pero no podrán detener la primavera y la primavera del cambio comenzará este domingo en La Banda.
Agregar Comentario