En el día de la fecha un diario local ultra oficialista publicó que, los dos tabiqueros que aseguraron ver a «Rody» Sequeira -señalado como el autor material del asesinato- tomar a Marito Salto de los brazos y forzarlo a ingresar en un auto, ahora se arrepintieron de sus declaraciones brindadas hace 6 meses atrás. Hace un par de semanas atrás el ex juez Miguel Moreno -quien tenía a su cargo el caso Marito Salto- presentó una serie de denuncias ante el Juez Federal Claudio Bonadio, donde dejó totalmente expuesto al zamorismo y a sus «mañas».
Es por eso que el oficialismo santiagueño busca a toda costa desligarse del asesinato del niño de 11 años Marito Agustín Salto y del flagelo del narcotráfico dentro del territorio provincial.
Ante este desfavorable panorama y como estrategia para salvaguardar el gobierno del matrimonio Zamora, la jueza Rosa Falco, quien actualmente tiene a su cargo el caso Marito y sobre la que pesa una orden de investigación de la justicia federal tucumana por “prevaricato y abuso de autoridad”, reactivó la investigación y ordenó una serie de medidas con el fin de “embarrar la cancha”.
Ya pasaron más de seis meses desde que encontraron los restos del pequeño y cuatro desde que Falco asumió en la causa, es decir, transcurrió mucho tiempo y sin embargo hoy la magistrada ordenó allanamientos en lugares en donde sería casi imposible encontrar alguna prueba que pueda rescatarse para la investigación.
Tras las denuncias de Moreno, «Rody» Sequeira estaba dispuesto a hablar y ventilar hechos que complicarían aún más a varios miembros del gabinete. Como consecuencia, Falco altamente influenciada por el zamorismo, también buscará desvincularlo a él y a diversos funcionarios que se encuentran asociados al horrendo crimen.
Para llevar a cabo esta vil maniobra Falco pondrá en duda los testimonios de dos tabiqueros que aseguraron ver a Sequeira tomar a Marito de los brazos y forzarlo a ingresar en un Renault Clio el día de su desaparición.
Vale destacar además que los llamados telefónicos entre el principal señalado como el autor material y Marcelo David Pato, Secretario de Seguridad de la provincia, demostrarían claramente la fuerte unión entre la policía, el narcotráfico y el crimen de Marito.