Médicos del cuerpo forense del Poder Judicial determinaron que Jorge Chueco no estaba en condiciones de declarar este miércoles ante el juez federal Sebastián Casanello en el edificio de Comodoro Py, por lo que el detenido abogado de Lázaro Báez permaneció en el penal de Ezeiza.
Fuentes de la investigación señalaron que Chueco «continúa muy deprimido«, internado en el Prisma (Programa Interministerial de Salud Mental Argentino), que es el área del penal de Ezeiza donde están los presos con problemas psiquiátricos y de adicciones, como el ex secretario de Obras Públicas, José López.
Pero, además, fuentes judiciales informaron hoy que renunció su abogado, Osvaldo Peña Álvarez, por lo que a su depresión se sumaría la ausencia de defensa.
Chueco fue detenido en la ciudad de Encarnación, en Paraguay, el 19 de abril, luego de permanecer cinco días prófugo, y como consecuencia de un llamado que hicieron a la policía los encargados del hotel Saint George, donde estaba alojado, cuando lo vieron en uno de los balcones en una actitud que hacía pensar en un intento de suicidio.
El juez Casanello había emitido el 18 de abril la orden de captura nacional e internacional de Chueco en el marco de la causa por presunto lavado de dinero que tiene procesado al empresario Lázaro Báez.
En su primera declaración, el 21 de abril, apenas llegado de Paraguay, luego de pasar la noche en Misiones, Jorge Chueco negó haber participado en maniobras de lavado de activos para Báez, pero no respondió preguntas concretas.
En esa declaración, Chueco reconoció que en Paraguay intentó suicidarse: «Intenté suicidarme y no lo logré. Lo lamento», le había dicho el abogado a Casanello.
En esa oportunidad, Chueco fue sometido a una pericia por parte del Cuerpo Médico Forense que determinó que estaba en condiciones psíquicas y físicas de afrontar la indagatoria, algo que no ocurrió hoy, cuando los médicos del Poder Judicial determinaron que no estaba en condiciones de hacerlo.
Chueco está imputado en la misma causa por la que fueron procesados con prisión preventiva Lázaro Báez y su contador Daniel Perez Gadín, ambos alojados en el mismo módulo de la cárcel de Ezeiza, con otros presos de baja conflictividad.
