Por Juan Pablo Suárez
Es la primera vez que le toca remar en aguas picadas, los medios de comunicación nacionales se muestran interesados más que en las obras en los sobreprecios de las mismas. Manejan números, tiran data, averiguan, se han metido en el pago chico, recorren sus dominios sin pedir permiso, no muestran respeto, dan información que desde su punto de vista es absolutamente cuestionable, se ha roto el halo mágico. Zamora es a la consideración de muchos argentinos por lo menos en apariencia un corrupto pero no para sus simpatizantes, para ellos no…
Ellos han salido a las redes sociales a defenderlo a capa y espada, trolls, simpatizantes y hasta funcionarios que con sus perfiles propios dan la cara denostando y amenazando a cualquier opositor que se interponga entre ellos y el sueño de Gerardo 2017. Cierran cada vez más firmes las filas detrás de él. Lo protegen como una cuestión de Estado, repitiendo la lógica kirchnerista (de ellos o nosotros) las operaciones aumentan a cada momento y al parecer hay una nueva víctima en el horizonte.
Ya pasó Chabay, pasó Julio Alegre ¿lo que está por venir es Rached? Porque en este juego no importa si son culpables o inocentes, lo que de verdad interesa es que salgan de la cancha, es que dejen de ser un obstáculo entre él y su próxima candidatura a gobernador. En Santiago del Estero la inocencia y la culpabilidad son total y absolutamente relativas. La justicia no es justicia, así como el pueblo no es pueblo sino el medio para lograr el fin, uno que satisface sólo al Senador y solamente a él, un onanismo mental del que padece sin freno y con furia.
FALTANDO UN AÑO PARA LAS ELECCIONES
Este pequeño sismo que ha comenzado en la provincia seguramente con el pasar de los meses se irá transformando en un terremoto que al parecer no dejará nada en pie, que promete devorarse a actores políticos y otras yerbas. Será tierra arrasada hasta octubre de 2017, sólo quedarán los que deban quedar, los demás serán los caídos de la guerra que está por venir, una con final incierto porque el cada vez menos fuerte hombre de la política santiagueña ha mostrado características humanas. Es mortal como sus adversarios y ya no goza de un lugar en «El Olimpo», monte que habitaba junto a otros dioses de su garbo en décadas pasadas y GANADAS.
Las plumas execrables reposan “el descanso del guerrero” en las sombras para mantenerse como inexistentes hasta que su mandante los levante exigiéndoles que sus trazos vuelvan a matar. Y ellos matan, y otros mueren, y los guerreros vuelven al descanso hasta que sus servicios sean demandados nuevamente cuando otra víctima deba ser ajusticiada por orden de una deidad que ya no es, o cada vez lo es menos hasta el punto en el que los iluminados escribas ya no respondan al antojo del que más temprano que tarde descubran es simplemente «EL REY DESNUDO».
