Afectado por una especie de virus en los últimos tiempos, el gobernador salteño tiene como berretín dejarse deslumbrar por la farandula porteña, ya que es conocida su relación con la modelo y actriz Isabel Macedo que lo llevaron a ocupar las portadas de las revistas del corazón y de la sección espectáculo, pero además, durante la presente semana fue parte del circo armado por Marcelo Tinelli en el lanzamiento de la temporada de Showmatch.
Allí se presentó mostrando sus escasas virtudes como actor. Un vendedor de empanadas haciendo el contrapunto del conocidísimo conductor, es decir, un acto de superficialidad absoluto mientras en Salta la falta de justicia está a la órden del día. Aquí relatamos lo que una niña debió padecer y por la cual ni él ni sus funcionarios se responsabilizaron. Quizás crea que la joven muchacha está realizando una representación teatral. Sin embargo, se trata de la vida misma o de la muerte próxima. Durante esta semana salió a la luz un nuevo caso de violación, esta vez la víctima fue una niña wichí de tan solo 12 años. La misma fue atacada brutalmente por al menos 7 hombres. Este lamentable y triste hecho sucedió en Alto de la Sierra, departamento de Rivadavia, provincia de Salta.
Además, la pequeña está cursando su sexto mes de embarazo, producto de la violación, al mismo tiempo, el feto tendría una malformación craneana. A la niña se le negó el derecho al aborto no punible y la posibilidad de declarar mediante Cámara Gesell por no hablar español.
Este caso generó mucha controversia en el ámbito político, puesto que se cuestiona enérgicamente el accionar de la Ministra de Derechos Humanos y Justicia Dra. Pamela Calletti, y al Ministro de Asuntos Indígenas y Desarrollo Comunitario Luis Gomes Almaras.
Por su parte, la legisladora salteña por el Partido Obrero, Gabriela Jorge, pidió la renuncia inmediata de la ministra Calletti “por ser responsable del abandono de persona que sufrió la niña wichí, a quien además negó el acceso al aborto no punible, ratificado por el Fallo de la Corte Suprema de Justicia. El caso de la niña muestra nuevamente el estado de vulnerabilidad completa en la que nos encontramos las mujeres y las niñas en esta provincia.
También se pronunciaron a favor de la niña wichí Alvaro Ulloa Titular de Inadi Delegación Salta y brindó datos realmente alarmantes de la situación social por la que atraviesa la Comunidad. Contó que en noviembre del año pasado seis o siete hombres la atacaron, la violaron y la dejaron tirada a orillas de la represa. Su padre Nicasio, hizo la denuncia, el médico la reviso y comprobó violencia. Ese galeno que trabaja en Alto la Sierra es boliviano, estudio en Cuba y no puede firmar en Argentina porque no revalidó su título.
Es necesario resaltar que la niña abusada tiene una discapacidad severa, y según cuenta Ulloa, nunca cobró la asignación universal de la niñez. Nadie del gobierno de Urtubey se pronunció para dar una explicación sensata sobre este caso que entristece a Salta que en cuestiones de DDHH tiene poco con la gestión Urtubey, pero sí lo hicieron para apoyar y avalar la decisión de la ministra Calletti. La provincia salteña se encuentra conmovida por la violencia ejercida sobre esta pequeña, que fue abandonada por el Estado y privada de todos sus derechos por no hablar castellano.