El pasado jueves, Guillermo Whpei, Presidente de la Fundación para la Democracia Internacional, presentó al Papa Francisco en la sede romana de la Fundación Scholas Occurrentes, un documento que detalla la situación de los migrantes que, bajo el sistema de patrocinio, trabajan en la construcción de los estadios y hoteles con vistas al Mundial de Fútbol Qatar 2022.
Hace unos días, empezó a circular con fuerza la posibilidad que FIFA le quite la sede de 2022 a Qatar y se la de Estados Unidos, México y Canadá para realizar un Mundial conjunto.
«El objetivo de mi visita al Vaticano fue visibilizar la problemática de Qatar, y se pudo hacer con mucho éxito. Hubo muy buena recepción de parte del Papa», dijo Whpei.
«Es un Mundial que viene con profundas sospechas de una designación viciada», agregó el empresario rosarino.
Whpei afirmó que el objetivo de la Fundación es buscar que la FIFA cambie la sede del Mundial.
«Que se replantee la sede. Ya hay 2.000 muertos en la construcción. Yo lo veo a este Papa como un aliado incondicional de las causas nobles, por eso le pedí ayuda. La esclavitud es el gran tema y la gran deuda de la democracia», agregó Whpei, quien recordó la existencia de 45 millones de esclavos en el mundo.
El informe denuncia la situación de 2 millones de trabajadores -los cuales representan el 95% de la fuerza de trabajo del país-, que son explotados principalmente en los sectores de la construcción y de trabajo doméstico.
Las contrataciones se hacen a través del sistema de Kafala, que es un sistema de patrocinio necesario del trabajador por parte de un qatarí, que es quien decide su destino laboral. Si el patrocinador no lo aprueba, el trabajador no puede volver a su país o cambiar de trabajo por más abusivas que sean las condiciones de contratación. Qatar aseguró dejar de lado este sistema pero en su lugar implantó uno que requiere contratos de mínimo 5 años, y autorización para cambiar o salir del país, lo que termina en la misma situación de privación de la libertad.
El documento presentado a Su Santidad se titula “Detrás de la Pasión: La trama de esclavitud moderna y corrupción que se esconde detrás del fútbol” cuenta con el aval de los Premios Nobel de la Paz Rigoberta Menchú Tum y Adolfo Pérez Esquivel y concluye con una propuesta de accionar conjunto en contra del avance de este tipo de prácticas. Además, plantea la responsabilidad de la FIFA, organismo que ha sido interpelado por diversas organizaciones y ha intentado desligarse del tema.
La Fundación para la Democracia Internacional viene desarrollando una agenda de trabajo sobre estos temas para poner sobre la mesa la problemática y evitar que se sigan las obras bajo estas condiciones de precariedad laboral y violación a los derechos humanos.