Finalmente el cerebro de la multimillonaria estafa en la fotocopiadora del PAMI se entregó a la policía y se puso a disposición de la justicia en las primeras horas de esta mañana.
Se trata de Walter Rago, a quien buscaban intensamente tras la acusación de su primo Ariel Rago, que ya se encontraba detenido y es el dueño de la fotocopiadora en cuestión.
La defraudación consistía en utilizar carnés de afiliados fallecidos, para prescribir recetas de costosos medicamentos, retirarlos de forma gratuita en farmacias locales para luego venderlos ilegalmente.
La policía sabía que se encontraba oculto en la provincia de Córdoba, sin embargo no podía ser ubicado con precisión razón por la cual se llegó a plantear la posibilidad de pedir ayuda a la Interpol.
Días atrás su abogado defensor había presentado un pedido de eximición de prisión, pero finalmente esta fue rechazado.