El presidente Mauricio Macri admitió que se equivocó en su manejo sobre las sociedades en paraísos fiscales revelados en los «Panamá Papers», al señalar que el tema le pareció «insignificante» y que «tendría que haber lanzado una explicación».
Además, en una entrevista que publicó hoy el diario español ABC, el jefe de Estado dijo que «todos» tienen que dar explicaciones ante la Justicia, cuando se le preguntó por la situación de la ex presidenta Cristina Kirchner, alertó sobre el «populismo» en Europa y cargó contra el chavismo, al que acusó de violar «todos los derechos humanos» en Venezuela.
Cuando se le mencionaron las críticas recibidas por la tardanza en dar explicaciones sobre los Panamá Papers, Macri contestó: «Lo vi tan insignificante que me equivoqué. Cuando vino la primera pregunta de los periodistas europeos yo tendría que haber lanzado una explicación. Pero vi absurdo que me preguntaran algo sobre una sociedad de mi padre». «Yo trabajaba para él pero hace 20 años y la empresa estaba declarada en la Agencia de Impuestos. No había nada malo y subestimé el fenómeno», añadió.
Sobre la ex presidente, mencionó: «Mi tarea es gobernar, crear futuro, poner la información pública a disposición de la Justicia y de los ciudadanos para que controlen, vean que no haya impunidad ni para atrás ni para adelante. Y es la Justicia la que tiene que determinar qué hizo cada uno. Mi Gobierno no se mete en la Justicia. Me han criticado por eso pero está mal operar. Los poderes deben estar separados y no debe haber intromisión». «No puedo dar mi opinión, soy el presidente. Lo importante es que todos demos cuenta a la Justicia», contestó cuando se le repreguntó por la ex mandataria.
Al hablar de la herencia que recibió del kirchnerismo, mencionó «un Estado devastado, carcomido por la inoperancia y la corrupción. Sin saber cuáles eran las reservas, el porcentaje de inflación, de pobreza, de PIB, las estadísticas de inseguridad, ni siquiera de accidentes de tráfico…Ha costado mucho empezar a construir una herramienta de navegación. Hemos tenido que pilotar un avión sin instrumental».
En ese marco, consideró un «peso» al «populismo», advirtió sobre las «propuestas de disrupción que no tienen responsabilidad con la gestión» y dijo esperar que la fuerza Podemos «no» sea el kirchnerismo: «Espero, por los propios españoles, que tengan un mayor apego por la calidad institucional y la calidad de gestión».
A nivel local, el mandatario ratificó que «en el segundo semestre, como prometí, va a bajar la inflación, que es el gran flagelo de la gente que menos tiene, se van a empezar a ver las inversiones y el año que viene vamos a crecer».
Mientras que a nivel regional enfatizó que el Ejecutivo venezolano «es un Gobierno que ha violado todos los derechos humanos, por los cuales estamos todos trabajando y defendiendo. Ha llevado a la hambruna y al abandono a la población venezolana. Por eso necesitan un referéndum, necesitan ir a elecciones lo más rápido posible».
«El populismo después de años de bonanza mostró los niveles de estafa que había generado, especialmente en nuestro país. No quiero opinar de otros países. Pero se mostró claramente la necesidad que había de gobernar cerca de la gente, dándole valor a la palabra, a los compromisos, resolviendo los problemas en tiempo real y no vivir de relato en relato. Esto es lo que la gente hoy reclama», sostuvo.
En esa línea, afirmó que «hay países que se adhirieron» al «Socialismo del siglo XXI» y que «Venezuela fue un espejo donde se miraban. Por suerte evitamos que la Argentina llegase a la ‘chavización’ en 2013, que fue el pico de conflicto, y entramos ahora en esta era de cambio», concluyó.
