Nadie les aviso nada teniendo el aparato completo trabajando en esas caravanas, ellos siguieron con la fiesta como si nada ocurrió, luego de todos los vídeos, las fotos y el proselitismo se dieron cuenta de que pasó algo grave, tan grave que ahora alguien debe pagar las culpas.
Dos accidentes, el primero horas antes en avenida Aguirre y Congreso, casi la misma tragedia; un camión paso por encima a una moto con dos acompañantes, como una advertencia de lo que podía ocurrir después, sin embargo se aplica una frase del mundo del fútbol: siga, siga!.
El más grave, tristemente viralizado con muchos puntos para analizar, una ambulancia irónicamente participaba de la caravana iba adelante posteriormente al momento trágico, una mala maniobra de la madre o la camioneta le cerró el paso? Es lo que ahora todos se preguntan, que fue lo que desencadenó el tragico final.
Mientras dos accidentes ocurrían, ellos continuaban su paso, las cámaras de todos los medios estaban puestos en ellos, ellos eran las estrellas de rock saludando a cual empleado de la administración pública se encontraba a su paso llegando así a La Banda dónde los esperaba su pupilo.
Ya en La Banda, mientras las burlas hacia los bolsines de Nediani generaban un ambiente relajado, habían pasado más de una hora del lamentable y ellos continuaron, poco sirvió el personal de tránsito y los policías que tantas veces quitaron motocicletas, ellos debían concluir.
Hoy se lamenta la muerte de una menor que tenía una vida por delante, alguien se tiene que hacer cargo. Salvando las distancias esto es parecido a Cromañón con muchas menos víctimas por supuesto pero con la misma gravedad donde nada fue intencional y fueron juzgados hasta un Jefe de Gobierno
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