Luis D’Elia cruzó con dureza y sin piedad al «Chino» Navarro por la partida del Movimiento Evita del Frente Para la Victoria: «Si la crisis tiene una virtud en si misma revela cuáles son los sectores que tienen falta de convicción y de compromiso. Ellos le faltaron a la causa nacional, popular, democrática y revolucionaria, la causa Kirchnerista» dijo el dirigente. Luego aceptó la crisis del partido y dijo: «Una de las virtudes de la crisis es que nos queda claro a dónde llega el aguante y las convicciones de algunos compañeros. El objetivo no era yo sino Cristina (Kirchner). Para mí es un chorro común que robaba para él, un corrupto, un delincuente» sentenció.
Prosiguió con más fuerza: «En momentos que la embajada de Estados Unidos, la oligarquía local y los medios hegemónicos la quieren meter presa, antes del 9 de julio, porque quieren celebrar el segundo centenario de la patria con Cristina presa. Los muchachos de la Evita se despachan con este tipo de conducta. Convoco a la base del movimiento a sublevarse contra su gente, contra esta traición. Esto me revuelve las tripas. El tipo que jugaba amor eterno el 9 de diciembre se aleja. Hoy sabemos que se van por negocios con (Mauricio) Macri»
Luego le contestó a los dichos de Navarro sobre los robos de José López: «Si hay un tipo que no puede hablar del tema corrupción ni de ética es el ‘Chino’, él apareció en la esfera pública a fines de los años 90 cuando era concejal de Lomas de Zamora con el tema de las fotocopias truchas. Nosotros pensábamos que había cambiado, pero sigue siendo lo mismo, un puntero de lo peor de la política. Eso en mi barrio tiene nombre y apellido, te lo digo en la cara chino, eso se llama traición» concluyó el dirigente.
Navarro fue cauteloso y no se inmiscuyó en el debate, simplemente dijo: «Supongo que mas allá de los excesos verbales que son habituales en él, lo considero un hombre de bien, es para charlarlo tranquilo en un bar» se alejó. Terminó con «tenemos que hacernos cargo«, sobre el caso José López.