La insensibilidad humana cometida con esta mujer de 25 años sorprendió a toda la provincia luego de conocerse el caso de Felisa Santillán, quien se encontraba en evidente trabajo de parto y desde el hospital de Monte Quemado le dijeron “aguanta no hay apuro” y decidieron trasladarla al hospital Regional, a 340 km de distancia.
El poco valor que significa la vida de esta joven madre y de la de su pequeño bebé para todos los que fueron partícipes y cómplices de esta brutalidad despierta un sentimiento de rabia. ¿Quién podría ser capaz de maltratar de esa manera a una mujer que pide a gritos ayuda para traer a su bebé al mundo? Lo que contaremos a continuación parece sacado de un film de terror, pero es real y sucedió en el interior de nuestra provincia.
En este acto poco humano se sucedieron otras acciones en contra de Santillán y de su bebé. Por ejemplo, a la hora del traslado tuvo que compartir ambulancia con otra mujer que también estaba siendo trasladada a la capital para que se le hiciera una cesárea (Karina Cisnero), la misma iba acompañada de su hermana Rita Analía.
Felisa por supuesto realizó una denuncia en la seccional 14 en donde dejó asentado que “Partieron del lugar a las 13:45 y a alta velocidad, al llegar a la localidad de Tintina siendo la hora 16:30, Santillán no aguantaba más los dolores así que a fin de calmarla ingresaron al hospital del lugar y fue atendida por el médico de guardia Dr. Alustizar quien le colocó un suero y realizó el tacto rompiendo completamente la bolsa causándole peor dolor y pérdida de más líquido”
Se supo que Santillán imploró ser internada en el hospital zonal de Tintina, pero el médico Alustizar “se negó y le dijo que continúen con el traslado”. Una hora y media después, la parturienta “no aguantó más y vio que el bebé ya se encontraba saliendo de forma normal y le golpearon fuerte la cabina al conductor para que parara pero fue en vano y estos se encontraban escuchando música a alto volumen” dice en otro párrafo de la denuncia.
Ante el desinterés de quienes estaban a cargo de las madres, la otra mujer embarazada que iba en la ambulancia junto a su hermana ayudaron a Felisa Santillan a completar el parto, todo esto mientras el rodado seguía en marcha, hasta que un enfermero se dio cuenta de lo ocurrido y decidió bajarse y acompañarla hasta llegar al hospital de La Banda.
“A su ingreso al Centro Asistencial fue derivada a la sala de neonatología donde le diagnosticaron que el bebé había sufrido paro cardiorrespiratorio a causa de la pérdida de líquido, mala posición y los movimientos de traslado que complicó el mismo, en donde hora actual se encuentra en estado de coma con muerte cerebral” concluye la denuncia.
