La pena recayó sobre Gustavo Daniel Garay (50), quien había llegado al debate en libertad pero hace una semana quedó detenido por orden del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 5 de San Isidro tras un adelanto de veredicto.
«Se trata de la primera vez que una persona que agrede a una docente en la provincia de Buenos Aires recibe esta condena ejemplificadora y por eso estoy contenta», dijo la víctima, Cinzia Pellegrini (51).
La vicedirectora del colegio 503 de San Fernando contó que, durante el juicio oral, su abogado Diego Onorati le pidió al tribunal que cambiara de lugar al ahora condenado porque la amenazaba «con la mirada», por lo que consideró que si salía en libertad podría haberla atacado nuevamente.
«Tengo muchas ganas de volver a ser la que era pero sé que eso es imposible, yo recibía a los papás y hoy por hoy no tengo la capacidad de estar sentada con alguien porque no sé quién está enfrente mío dado que no hay un solo Garay, la realidad es que violentos hay un montón«, expresó la mujer respecto a que desde el día del ataque no regresó al colegio ni al distrito de San Fernando.
Pellegrini aseguró que es común que en las escuelas donde generalmente trabajan mujeres los hombres las agredan o amenacen sólo por esa «condición».
Además, la vicedirectora contó que en los próximos días deberá someterse a una nueva cirugía para que le coloquen unas placas que sustituirían al hueso occipital que perdió a raíz de los golpes que sufrió.
En tanto, el abogado dijo que los jueces lo condenaron por el delito de «homicidio simple en grado de tentativa» y desestimaron que se haya tratado de un intento de «femicidio» como había pedido él y la fiscal Bibiana Santella.