La Argentina fue uno de los primeros países en expresarse formalmente sobre la suspensión por 180 días de Dilma Rousseff al frente de la presidencia de Brasil.
A primera hora de hoy, desde la cancillería emitieron un comunicado al respecto:
«Ante los sucesos registrados en Brasil, el gobierno argentino manifiesta que respeta el proceso institucional que se está desarrollando y confía en que el desenlace de la situación consolide la solidez de la democracia brasileña. En tal sentido, el gobierno argentino continuará dialogando con las autoridades constituidas a fin de seguir avanzando con el proceso de integración bilateral y regional».
Los conceptos fueron refrendados instantes después por la canciller Susana Malcorra, quien utilizó su cuenta oficial de Twitter para reiterar las mismas palabras.