En su relato ante los fiscales investigadores del caso, el electricista Gustavo Andrés Bartolín, alias «Voltio», declaró cómo salió a comprar la cocaína que fue consumida en la fiesta del mes pasado en el salón de fiestas Xanadú en Villa La Ñata en donde perdió la vida Natacha Jaitt.
«Voltio», vecino de la zona, dijo que fue a pedido del dueño del lugar, su amigo, el empresario Gonzalo Rigoni y de otro invitado, Gaspar Fonolla, que le compró «dos mil pesos» de droga a «un pibe de visera en el Dique Luján», un valor callejero que podría traducirse en cuatro gramos aproximadamente.
Quien habría sido ese dealer está detenido: la Superintendencia AMBA Norte de la Policía Bonaerense lo apresó a las 3 de la mañana de hoy. Es Guillermo Francisco Ruiz, alias «Pupi», de 37 años de edad. Cayó precisamente en una casa en el Dique Luján, a 25 cuadras del salón Xanadú. Según fuentes policiales, se le incautaron más de 60 bolsitas de cocaína y unos pocos gramos de marihuana.
Ruiz tendría antecedentes penales, con varias entradas y salidas de cárceles de la provincia. El comando de patrullas de Tigre también participó en la captura.
Así, «Pupi»quedó a disposición de la UFI de Drogas Ilícitas del fiscal Esteban Álvarez.
Los análisis realizados por la Superintendencia de Policía Científica del Ministerio de Seguridad bonaerense a muestras de orina y sangre tomadas del cuerpo de Jaitt en la autopsia realizada en la Morgue de San Fernando a horas de su deceso arrojaron resultados positivos para la cocaína en orina, sangre y fosas nasales.
La droga también fue detectada en el contenido gástrico recolectado. Se descubrió que Jaitt también poseía 0,7 de alcohol en sangre al momento de perder la vida.
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