En la noche del jueves, Ariel Holan fue interceptado por tres autos con barras que le pidieron dólares para viajar el miércoles próximo a Asunción, para estar presentes en el partido ante Nacional, por los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
Pero el DT del Rojo no cedió al apriete e intentó irse. Sin embargo, los barras siguieron a Holan a un restaurante, donde volvieron a pedirle una fuerte suma de dinero.
Afortunadamente, el episodio no pasó a mayores y tanto el entrenador como sus asistentes no resultaron heridos.
Pese a que Holan no realizó denuncia al respecto, autoridades del Ministerio de Seguridad se comunicaron con el Fiscal General de Lomas de Zamora, de quien depende la fiscalía de Avellaneda con jurisdicción donde ocurrió el hecho, para comenzar una investigación penal, ya que es un delito de acción pública.
Por ello, el titular de la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide), Juan Manuel Lugones, se presentará ante la Justicia para realizar la denuncia formal, ya que «estos sujetos son delincuentes y tienen que quedar presos».